martes, 16 de noviembre de 2010

Una reflexion con acido. ay que gusto.

Realmente lo que quero decir es que estoy cansada de intentar comprender las acciones de los demas. No me importa, al final, no son mi responsabilidad.

Para ilustrar un poco mi sentimiento digo por ejemplo: si se me confia un gran tesoro,  trabajo dia a dia en él para encontrar la verdadera riqueza, que se manifiesta despues en mi hacer, en mi pensar, en mi hablar, en mi sentir,  no tengo necesidad de expoliarlo pensando que puedo hacerlo en ayuda a los demas y que lo he "creido" comprender lo puedo comunicar a otros, sin pensar por un instante que ha pasado por mi filtro personal y que le he dado una interpretación conforme a mi estado de ánimo. Hay tanto que caminar en el sendero de la humildad pues si bien, el camino del guerrero es un camino de regreseo, no significa que alguien viene y te dice con palabras algo que ya sabias, no,  significa que en la vida de un guerrero no hay nada por sentado y no hay un hecho igual al otro, y no existen definiciones, ni descripciones, ni comprensiones intelectuales, en la vida de un guerrero solo hay cabida a la experimentación, libre y voluntaria,  cada instante marca una diferencia y por eso resulta tan complicado ser impecable y actuar con sobriedad.

Hay una diferencia muy grande, asi solo sea un hilo el que separa la humildad del hubris.

Y en este punto creo que el gran pecado de la humanidad es creer que todo lo sabe, no dejar espacio para fluir en lo desconocido, no confiar en ello, y se olvida que la intrepidez no es la ley del mas fuerte o el mas valiente

Ay.

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