No puedo dejar de sorprenderme, cada vez que me viene un pensamiento sobre ti, sobre tu vida, sobre lo que haces, lo que dices, lo que aparentas, lo que eres. No pienso nada mas, no estoy en grado de juzgarte, porque has pasado ya como un ave dejando una pluma para recordar tu presencia en el mundo. Y me sorprendo otra vez, preguntándome ¿cómo pude pensar que podrías ser algo que no podías ser? y entonces sonrío porque la respuesta esta ya clara y elegida. Como el polvo que se alza hacia el cielo y desaparece.
Adiós y suerte!
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